La posesión no es nueve décimas partes de la ley. Son las nueve décimas partes del problema.
Tiempo le gusta perder, no fue en vano.
¡Yo no creo en el asesinato cualquiera que sea la razón!
Si tú trataste de darle al rock and roll otro nombre, solo podrías llamarlo Chuck Berry.
Todo el mundo te ama cuando estás a seis metros del suelo.
Cuando te estás ahogando, no dices "yo estaría extremadamente contento si alguien viera que yo me estoy ahogando y viniese a ayudarme"; simplemente gritas.
Imagina a toda la gente viviendo la vida en paz. Usted puede decir que soy un soñador, pero no soy el único. Espero que algún día te unas a nosotros y el mundo será uno solo.
Él no salió de mi vientre, pero mi Dios, he hecho sus huesos, porque yo he asistido a todas las comidas, y la forma en que duerme, y el hecho de que nada como un pez porque me lo llevé a la mar. Es...
La cruz de la Legión de Honor se ha conferido a mí. Sin embargo, pocos escapan a esa distinción.
Jesús tenía razón, pero sus discípulos eran corrientes y ordinarios. Son ellos los que lo arruinaron todo para mi.
Lo que importa no es pensar en el pasado ni en el futuro. Lo importante es cargar con el ahora.
Lo que hicieron los años sesenta fue que nos mostraron las posibilidades y la responsabilidad que todos teníamos. No era la respuesta. Solo nos dieron una posible idea.
No estoy reclamando la divinidad. Nunca he reclamado la pureza del alma. Nunca he reclamado tener las respuestas a la vida. Yo solo compuse canciones y respondí a las preguntas lo más honestamente q...
La realidad deja mucho a la imaginación.
Tienes que ser un hijo de puta para conseguirlo, y eso es un hecho. Y los Beatles son los más grandes hijos de puta de la tierra.
Cuenta tu edad por amigos, no años. Cuenta tu vida por sonrisas, no por lágrimas.
Y Dios ayude a Bruce Springsteen cuando ellos decidan que él ya no es Dios... Ellos a su vez en él, y espero que lo sobrevive.
Creo que las heridas de tiempo todos los talones.
Era como estar en el ojo de un huracán. Te despiertas en un concierto y pensar: Wow, ¿cómo he llegado hasta aquí?
El cartero quiere un autógrafo. El controlador de cabina quiere una imagen. La camarera quiere un apretón de manos. Todo el mundo quiere un pedazo de ti.