Es una de las limitaciones más crueles del ser humano. La vida sería más llevadera si dispusiésemos de una segunda oportunidad.
A mí, que era su contrario me maravillaba su capacidad de adaptación.
Tenía una imaginación espumosa.
Era todo cariño, tan lejos del rencor, que a veces no recordaba por qué se había atado el hilo en el dedo
Estamos tan bien instalados en la abundancia que no es fácil convencer al vecino de que se sacrifique seriamente para impedir el calentamiento del planeta y hacerlo invisible para millones de persona...
El momento es crucial para que el hombre nos dé la medida de su sensibilidad
Siempre fue bella, pero, cuando la conocí, era tan bonita, inteligente y atractiva que tenía alrededor un centenar de moscones
Tengo la impresión desde chico de que estaba amenazado por la muerte. No de la mía, sino de la muerte de quienes dependía
A mí Madrid me da miedo, porque si Valladolid me parece ya un enorme aparcamiento, Madrid me parece cinco veces ese aparcamiento
Era un niño melancólico, triste, no me gustaba nada ir al colegio, era al mismo tiempo muy callado
Su encanto, su entrega, su disponibilidad. ¡Sabe Dios!... cuando una persona entra en uno, se hace indispensable y no es fácil olvidarla
Don Juan Carlos es un Rey sencillo, próximo al pueblo, compartiendo con él los acontecimientos del día a día
Daniel aceptó este hecho con la resignación con la que se aceptan las cosas ineluctables.
Había motivos para estar triste y para desesperarse y para desear morir, y algo notaba él que se desgajaba amenazadoramente en su interior, aunque el Sol brillase eternamente, aunque cantasen precio...
El sexo debe ser misterio y descubrimiento personal.
En las guerra no gana nadie, pierden todos. Y si la guerra es civil, la pérdida es más fuerte que la de cualquiera otra guerra
Un pueblo sin literatura es un pueblo mudo.
El estado de felicidad no existe en el hombre. Existen atisbos, instantes, aproximaciones, pero la felicidad termina en el momento en que empieza a manifestarse. Nunca llega a ser una situación conti...
Advirtió que los niños tienen ineluctablemente la culpa de aquellas cosas de las que no tiene la culpa nadie
No lloro. Me aguanto pero lo siento, tengo un sentimiento hondo pero sin llegar a la lágrima