Ernest hemingway mas alla de la derrota. Encuentra docenas de ernest hemingway mas alla de la derrota con fotos para copiar y compartir.
Si tienes la suerte de haber vivido en París como un hombre joven, entonces donde quiera que vaya para el resto de tu vida se queda contigo, porque París es una fiesta móvil.
Nunca escribas sobre un lugar hasta que estés lejos de él.
Puedo reconocer al general Aranda y al general Dávila e identificar el tipo de saludo que hacen; es el saludo del antiguo ejército español. Pero me cuesta identificar el saludo del obispo de Lugo, ...
Desde un punto de vista moral moderno, es decir, cristiano, la corrida es completamente indefendible; hay siempre en ella crueldad, peligro, buscado o azaroso, y muerte.
Pero yo prefiero ser exacto. Luego, cuando venga la suerte, estaré dispuesto.
Al mirarla y observar su agradable sonrisa, sintió que la muerte se acercaba de nuevo. Esta vez no fue con ímpetu. Fue una ráfaga, como las que hacen vacilar la luz de una vela y extienden su llama...
El mundo es un buen lugar por el que vale la pena luchar.
Comíamos bien y barato, bebíamos bien y barato, y juntos dormíamos bien y con calor, y nos queríamos.
La sabiduría de los ancianos es una gran error. No se vuelven más sabios, sino más prudentes.
Las guerras son causadas por la riqueza indefensa.
Es al ser vencido que uno se vuelve cristiano.
Toda la literatura estadounidense moderna parte de un libro de Mark Twain titulado Huckleberry Finn. Antes no había nada. No ha habido nada bueno desde entonces.
Eres una perra ?dijo-, una perra rica. Ahora estoy lleno de poesía. Podredumbre y poesía. Poesía podrida...
Todo hombre racional es ateo.
Los ricos son diferentes: tienen más dinero.
Algunos escritores solo han nacido para ayudar a otro escritor a escribir una frase. Pero un escritor no puede derivar de un clásico que le precede.
El fascismo es una mentira contada por matones
El talento consiste en cómo vive uno la vida.
Intentaba el oficio de escritor empezando por las cosas más simples, y una de las cosas más simples y fundamentales de todas es la muerte violenta.
Aprendió a pensar pero no supo ya volar, porque había perdido el amor al vuelo y no hacía más que recordar los tiempos en los que volaba sin esfuerzo.
Para que una guerra sea tan solo son necesarias tres condiciones - autoridad pública, justa causa, motivo correcto.
Cada día que pasaba rodeado de comodidades y siendo lo que despreciaba, embotaba su habilidad y reblandecía su voluntad de trabajo...
Ahora me han derrotado, pensó. Soy demasiado viejo para matar tiburones a garrotazos. Pero lo intentaré mientras tenga los remos y la porra y la caña.
El mundo es un buen lugar y vale la pena luchar y no me gusta mucho salir de él.
En la guerra moderna mueres como un perro y sin motivo alguno.
Cuando las lluvias frías persistían y mataban la primavera, era como si una persona joven muriera sin razón.
Nadie debiera estar solo en su vejez, pensó. Pero es inevitable.
Ahora: una palabra curiosa para expresar todo un mundo y toda una vida.
Requemado por el sol y la violada, redondeada, iridiscente, gelatinosa y violada vejiga de una medusa flotando cerca del bote.
Decadence es una palabra difícil de usar, ya que se ha convertido en poco más que un insulto aplicado por los críticos de todo lo que todavía no entienden, o que parecen diferir de los conceptos m...
La felicidad es la cosa más rara que conozco en la gente inteligente.
El mar es dulce y hermoso, pero puede ser cruel.
Los peces no son tan inteligentes como los que los matamos. Pero son más nobles y más hábiles.
Será más difícil de comer que el bonito, pero después de todo, nada es fácil.
He nacido para disfrutar la vida, pero Dios se olvidó del dinero.
Tal vez yo no debería ser pescador, pero para eso he nacido.
Quizás no fuese más inteligente que él ?pensó- acaso estuviese mejor armado.
El general con quien uno habla hará magníficos elogios del general derrotado, y luego se le caerá la baba contando con todo detalle cómo le derrotó.
El toreo es el único arte en el que el artista se encuentra en peligro de muerte y en el que el grado de brillantez en el rendimiento se deja al honor del luchador.
No hay persona digna de comérselo, a juzgar por su comportamiento y su gran dignidad.