Frases abelardo castillo. Encuentra docenas de frases abelardo castillo con fotos para copiar y compartir.
Los novelistas y los editores creen que una novela es más importante que un cuento. No les creas. Solo es más larga.
Si la palabra mercado te hace pensar persa, quizá no seas muy original pero todavía estás a tiempo. Si la palabra mercado te hace pensar en la venta de tu libro, no insistas con la literatura.
Los libros que yo escribo no están en mi biblioteca. El lugar de un libro tuyo es la biblioteca de otro.
Mucho antes de sentir que escribía yo ya era, creo, un buen lector y hasta diría, un muy buen lector.
¿Qué sentido tiene la literatura en un mundo sin sentido? No hay más que dos respuesta. La primera: ningún sentido. La segunda es precisamente la que hoy no parece estar de moda: el sentido de la ...
El escritor siente que no escribe nunca.
Miren que estarse ahí como un linyera, a la intemperie, sólo, qué cabeza estarse ahí tan pobre, tan cualquiera, da una cosa, caramba, una tristeza...
La poesía no es una manera de escribir, es más bien un modo de vivir, de percibir el mundo.
Yo diría que el poeta lo es por su manera de situarse ante el mundo.
El castillo de sus ilusiones se ha venido sin estrépito, sin dejar rastro, se ha esfumado como un sueño; y él ni siquiera se percata de que ha estado soñando.
Soy un hombre apasionado del viento, por él hubiera dado toda mi vida.
¡Desgraciados los traidores, madre patria, desgraciados. Ellos conocerán la muerte de la muerte hasta la muerte!.
La libertad sin una autoridad fuerte e incólume, no es libertad al cabo de poco tiempo, sino anarquía.
Saltó al vacío desde su castillo en el aire.
La família es el castillo del que partimos y nuestro último reducto. Cuando se se quiebra, caemos en la despersonalización más absoluta.
Mi amor por ti! terminara... cuando un pintor sordo escuche,
el sonido del rumor de un pétalo de rosa, que cae al pavimento de cristal de un castillo... que jamas ha existido..!
Deja que otros construyan una cueva con su arcilla. Yo construiré un castillo con la mía.
Castillo fuerte es nuestro Dios
Tú sabes, cuando construyes un castillo de mocos con tu hija, que es tiempo de calidad. Es en realidad lo que vivimos ahora, y lo hemos construido nosotros mismos.
Emplear el sarcasmo con según que gente es como atacar un castillo con merengues.
¿Qué es Dios para los cristianos? Un gran castillo, un poderoso escudo, una buena arma
Podía hablar de los bosques en invierno, y del siniestro muro de un castillo. ¿Pero cómo hablar de sentimientos?
Se puso Dantés de pie, y mirando hacia donde el barco parecía dirigirse, distinguió en la oscuridad, a cien toesas, la negra y descarnada roca en que campea como una esfinge el sombrío castillo de...
Además, olvida usted, señor Otis, que el precio que pagó incluía tanto el castillo como el fantasma...
Entonces cuéntanos todo al respecto, Edith, ya que sabes tanto. Cuéntanos una historia que comience: ?Érase una vez, una virgen nerviosa que se casó con el lord fantasmal de un castillo embrujado?...
Guthrie esperando y Christine esperando; pero no quizá la misma cosa. Guthrie asustado y Christine asustada; pero no quizá de la misma cosa. Aquí reside, en una palabra, mi preocupación ?casi mi a...
La política es el arte de aplicar en cada época aquella parte del ideal que las circunstancias hacen posible.
Pequeña patria, dulce tormenta mía, canto ubicado en mi garganta desde los siglos del maíz rebelde: tengo mil años de llevar tu nombre como un pequeño corazón futuro cuyas alas comienzan a abrir...
No me apena dejaros. Con vosotros queda mi esperanza.
Y nada podrá contra la vida porque nada pudo jamás contra la vida.
Si me preguntaras qué es lo que más quiero sobre la anchura de la tierra, yo te contestaría: a tí, amor mío, y a la gente sencilla de mi pueblo.
Intelectuales apolíticos de mi dulce país, no podréis responder nada. Os devorará un buitre de silencio las entrañas. Os roerá el alma vuestra propia miseria. Y callaréis, avergonzados de vosot...
Nunca preguntéis a un hombre si sufre, porque siempre se está sufriendo en alguna forma y en algún camino.
Nada es más invencible que la vida.
Y entender a todos y a todos decirle: vive, porque la vida es la poesía más alta.
Anduve viajando muchos años por el mundo, con el lucero de tu nombre en los ojos.
Dulce eres, como la tierra, como ella frutal y hermosa.
Pequeña patria mía, dulce tormenta, un litoral de amor elevan mis pupilas y la garganta se me llena de silvestre alegría cuando digo patria, obrero, golondrina.
Y no hubo una sola mañana, que se fuera sin algo de lo tuyo.
Ay, Guatemala, cuando digo tu nombre retorno a la vida. Me levanto del llanto a buscar tu sonrisa.