Frases de buenos modales para niños. Encuentra docenas de frases de buenos modales para niños con fotos para copiar y compartir.
Los buenos modales se consiguen a base de pequeños sacrificios.
Los buenos modales sirven de adorno al conocimiento y le abren paso a través del mundo.
¡Los buenos modales antes que la moral!
Que usted será lo que sea, escoria de los mortales, un perfecto desalmado, pero con buenos modales
Los monos son demasiado buenos para que el hombre pueda descender de ellos.
Se requiere de mucha desesperación, insatisfacción y desilusión para escribir unos pocos buenos poemas. No es para todo el mundo ya sea para escribirlos o siquiera leerlos.
A los viejos les gusta dar buenos consejos, para consolarse de no poder dar malos ejemplos.
El medio mejor para hacer buenos a los niños es hacerlos felices.
Guarda los buenos recuerdos para los malos momentos y escucha... Apuntate a la vida, a decir lo que sientes, a sentir lo que vales, a soñar lo que quieres y a saber que te sobra con tener lo que tien...
La religión debería servir más para dar ánimos a los buenos que para aterrorizar a los malos.
Los buenos modales tienen mucho que ver con las emociones. Para hacerlos sonar verdad, hay que sentirlos, no solo exhibirlas.
Siempre hay un tiempo para marchar aunque no haya sitio a donde ir.
El amor es la alegría de los buenos, la reflexión de los sabios, el asombro de los incrédulos.
El verdadero amor no es otra cosa que el deseo inevitable de ayudar al otro para que sea quien es.
Cuando la vida te presente razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una razones para reír.
El amor, para que sea auténtico, debe costarnos.
Ya ves, a veces me canso de mí y de no tener valor para buscarte y cometer todo delito que este amor exija. "Quieta ahí, tus labios o la vida".
No perdiste a nadie, el que murió, simplemente se nos adelantó, porque para allá vamos todos. Además lo mejor de él, el amor, sigue en tu corazón.
No puedo parar de trabajar. Tendré toda la eternidad para descansar.
Si supiera que hoy fuera la última vez que te voy a ver dormir, te abrazaría fuertemente y rezaría al señor para poder ser el guardián de tu alma.
Me he quedado con mi alma para pensar solo en ti.
Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para aprender a callar.
Para ejercer una influencia benéfica entre los niños, es indispensable participar de sus alegrías.
Los ancianos gustan de darnos buenos preceptos para consolarse de no poder darnos malos ejemplos.
Lo único que necesitamos para convertirnos en buenos filósofos es la capacidad de asombro.
Cuando estamos sanos, todos tenemos buenos consejos para los enfermos.
Buenos días. Hoy me levanté y decidí que te diría cuanto significas para mí y lo mucho que te amo.
Para decirte buenos días quisiera intentar tantas cosas, con tal de hacerte dar cuenta de lo mucho que significas para mí.
Siempre traspaso los buenos consejos que me dan. Es para lo único que sirven.
Los modales son la clave. Digamos, por ejemplo, cuando estás creciendo, vas andando por la calle, tienes que decirle a todos los buenos días. A todo el mundo. No te puedes dejar a nadie.
En un día cuando estás cansado, es importante darle los buenos días a todo el mundo para que vaya a ser un buen día. Jamie Lee Curtis me dijo un día eso.
Para tener buenos soldados, una nación debe estar siempre en guerra
Buenos días y buenas tardes para todos
¡No me seas comodón! No esperes el año nuevo para tomar resoluciones: todos los días son buenos para las decisiones buenas.
No tengo que esperar para darme cuenta de los buenos viejos tiempos.
Los hombres rara vez tienen el valor suficiente para ser o extremadamente buenos o extremadamente malos.
Yo espero que los buenos ciudadanos de esta tierra trabajarán para remediar sus desgracias. Ay Patria mía.
Muchas veces para ser buenos tenemos que dejar de ser honrados
Como educadores solo podemos ser optimistas. Con pesimismo se puede escribir contra la educación, pero el optimismo es necesario para ejercerla. Los pesimistas pueden ser buenos domadores, pero no bu...
La vida nos dice en sus lecciones que, alguna vez, para ser buenos, hay que dejar de ser honrado.