Trato de construir una personalidad plena para cada uno de nuestros dibujos animados, que tengan una personalidad propia.
Walt Disney
Algo se marchitó en él: quizás la fe en la perennidad de la infancia.
Felices son los pacíficos, puesto que a ellos se les llamará 'hijos de Dios'.
Que el obrero catalán se lance en brazos del socialismo o del anarquismo, no puede sorprendernos. Pero que los jóvenes vascos busquen en las promesas de gente invasora...
La mala palabra no nació así. La sociedad la hizo mala.