El viento de otoño sacude al espantapájaros y pasa.
Yosa Buson
Hacia Los Afluentes
Esta misma quietud
la reconoces,
el lecho de la luz,
esplendor del estío,
y tu pálido cauce adolescente,
la imagen aún borrosa del clamor y de la yerba.
Como un vaho transterra...
Los padres todo lo deben a sus hijos.
Estoy tan ocupada las nubes invernales no se detienen para descansar.
No eres más porque te alaben, ni menos porque te critiquen; lo que eres delante de dios, eso eres y nada más.