Aunque parezca una paradoja, no rara vez sucede que, aquéllos que se llaman a sí mismos hijos de la Iglesia, son precisamente los que mayor confusión siembran.
Josemaría Escrivá de Balaguer
Nuestra sociedad ha llegado al punto en que podamos pronto se convertirá en cada vez menos indignado por ningún tipo de violencia.
Cuando el amor se termina, te sigue faltando algo
Quizá alguien piense, sin embargo, que de este modo convertimos a los súbditos en esclavos, por creer que es esclavo quien obra por una orden, y libre quien vive a su antojo. Pero esto está muy lej...
Odio a las mujeres porque siempre saben dónde están las cosas.