De veras, nunca estoy solo. Tan solo estoy triste cuando tus ojos huyen del sitio en que debimos encontrarnos por la tarde.
Otto René Castillo
Donde hay vida hay calor; donde hay calor vital hay movimiento de humores.
Todos aquellos planes que no sean trazados plenamente según todas las disposiciones del género, tienen que fracasar.
La verdad desaparece al decirla.
El experimentador que no sabe lo que está buscando no comprenderá lo que encuentra.