Luego volví donde el olvido, mi único amor correspondido
Joaquín Sabina
Sin imaginación no puede haber creación.
Penetrar con el espíritu en el ser de una mujer es un arte; pero saber salir a tiempo es una obra maestra, a pesar de que este acto depende siempre del primero.
No existe una posible fuente del mal, excepto bien.
Sé que hay mucha gente por ahí que tienen las mejores intenciones, pero no la voz, así que es la gente como yo para darles una voz y escuchar sus ideas.