No solamente es ciega la fortuna, sino que de ordinario vuelve también ciegos a aquellos a quienes acaricia.
Cicerón
El amor nunca tiene razones, y la falta del amor tampoco. Todo son milagros.
Se tienen muchas ideas y pocos amigos o muchos amigos y pocas ideas.
No ha lugar la razón contra la fuerza de la pasión.
No es tan fiero el león como lo pintan.