De nada sirve morir. Hay que hacerlo a tiempo.
Jules Renard
La individualidad es un carácter impregnante de las cosas, pero también puede decirse que no hay nada individual que no tenga carácter reconocible mediante el pensamiento universal.
Dichosos los que pueden dar sin recordar y recibir sin olvidar.
La capacidad de entusiasmo es signo de salud espiritual.
Los hombres más eruditos no son precisamente los más sabios.