Para prevenidos no hay acasos.
Baltasar Gracián
Cuando vienes al mundo, lloras. Cuando mueres, el mundo calla.
El agradecimiento que solo consiste en el deseo, es cosa muerta, como es muerta la fe sin obras.
Los curas se consuelan de no haberse casado cuando oyen las confesiones de las mujeres.
La gratitud es la memoria del corazón.