Las leyes, como las casas, se apoyan unas en otras.
Edmund Burke
Las verdades de Perogrullo, que a la mano cerrada llamaba puño.
EN HOMENAJE A UNA NIÑA MUY QUERIDA LLAMADA LIMITA
Lo que hay de embriagador en el mal gusto es el placer aristocrático de desagradar.
lo mejor de la vida es amar, aunque nadie te ame en plena libetad