En aquella plaza…
Donde nuestros ojos alguna vez
Se encontraron entre tantos seres
Que deambulaban sin darse cuenta
De la existencia de nosotros.
Aquí traigo mis recuerdos
A esta plaza…
Que muchas veces escuchó nuestros
Nombres danzar junto al viento
Donde mis labios amaban a los tuyos
Uniéndose como dos lenguas de fuego
Luis Silva Nuñez