Hago el amor bajo la sombra de escorpión. Cuando las voces del abismo callan una miseria imperfecta sube por el cuerpo me azota. Las palabras del poema quiebran.
José Barroeta
La fortuna de comprender que el suelo sobre el que permaneces no puede ser más grande que los dos pies que lo cubren.
Mas, si existiera el camino de olvidarte, yo voy siguiendo el camino de quererte.
La gente te ve como te ves a ti mismo.
El ajedrez es un juego que me apasionó de joven, pero un buen día me empezó a tomar demasiado tiempo y entonces lo eliminé.