No debéis temer a la muerte, muchachos; desafiadla, y la echaréis en las filas enemigas.
Napoleón Bonaparte
Él atraía a los hombres por lo que en ellos había de más valioso.
La experiencia ha demostrado hasta qué punto las semillas de la guerra se plantan por la rivalidad económica y la injusticia social.
No es que muera de amor, muero de ti. Muero ti, amor, de amor de ti.
El amor hace a los esclavos libres, y a los libres esclavos.