Los niños son como Dios, llenos de ternura, paz y con el lenguaje universal del Amor.
Pedro Pantoja Santiago
Los niños deben ser muy indulgentes con las personas grandes.
La filosofía responde a la necesidad de hacernos una concepción unitaria y total del mundo y de la vida.
El aguacero de verano tamborea en la cabeza de las carpas.
Un amor que pregunta, si es virtud o es pecado, la fuerza que lo agita, eso es el amor soñado.