Ahuyentar

La voz de uno nunca debe estrangular los pensamientos propios ni ahuyentar los ajenos.

Coge la escoba de la ira y ahuyentar a la bestia del miedo.

Muchas maldiciones a un hombre de la lluvia que cae sobre su cabeza, y no sabe que trae abundancia para ahuyentar el hambre.

son más difíciles de ahuyentar los fantasmas que han estado en nuestras habitaciones.

Hay silencios que ni las palabras pueden ahuyentar

Cuando dejó libre la imaginación para contrastar el pasado y el presente, volvió agradecido a un libro, pues la lectura es lo único que puede ejercitar la mente y ahuyentar los pensamientos desagr...