Buenos. Encuentra docenas de buenos con fotos para copiar y compartir.
El victorioso tiene muchos amigos. El vencido, buenos amigos.
La amistad perfecta es la de los buenos y de aquellos que se asemejan por la virtud. Ellos se desean mutuamente el bien en el mismo sentido.
Los monos son demasiado buenos para que el hombre pueda descender de ellos.
Deben buscarse los amigos como los buenos libros. No está la felicidad en que sean muchos ni muy curiosos; sino pocos, buenos y bien conocidos.
Los hombres casados son horriblemente aburridos cuando son buenos maridos, e insoportablemente presumidos cuando no lo son.
Como Tinaja
En los días buenos,
de lluvia,
los días en que nos quisimos
totalmente,
en que nos fuimos abriendo
el uno al otro
como cuevas secretas;
en esos días, amor
mi cuerpo como tinaja
recogi�...
Se requiere de mucha desesperación, insatisfacción y desilusión para escribir unos pocos buenos poemas. No es para todo el mundo ya sea para escribirlos o siquiera leerlos.
No hay más goces reales en el mundo que el amor fiel de la casa, y la amistad en los pocos hombres buenos.
Los hombres son como los vinos: la edad agria los malos y mejora los buenos.
¡Cuán querida es de todos los corazones buenos su tierra natal!
Todos los medios son buenos cuando son eficaces.
El aburrimiento no puede existir donde quiera que haya una reunión de buenos.
Existen los jugadores duros y los buenos muchachos, yo soy un jugador duro.
No se hace buena literatura con buenas intenciones ni con buenos sentimientos.
Los malos libros provocan malas costumbres y las malas costumbres provocan buenos libros.
Siempre los ricos que dan en liberales hallan quien canonice sus desafueros y califique por buenos sus malos gustos.
Muchos son los buenos, si se da crédito a los testigos; pocos, si se toma declaración a su conciencia.
Todo está perdido cuando los malos sirven de ejemplo y los buenos de mofa.
A los viejos les gusta dar buenos consejos, para consolarse de no poder dar malos ejemplos.
Ningún gobierno puede sostenerse sin el principio del temor así como del deber. Los hombres buenos obedecerán a este último, pero los malos solamente al primero.
Cuando gozamos de salud, fácilmente damos buenos consejos a los enfermos.
El medio mejor para hacer buenos a los niños es hacerlos felices.
Guarda los buenos recuerdos para los malos momentos y escucha... Apuntate a la vida, a decir lo que sientes, a sentir lo que vales, a soñar lo que quieres y a saber que te sobra con tener lo que tien...
La religión debería servir más para dar ánimos a los buenos que para aterrorizar a los malos.
Me levante pensando en todo lo que tenía que hacer, entre ellas escribirte y darte los buenos días. Ansiosa por terminar pero la paciencia no es uno de mis dotes soy sencilla porque no pido más de ...
Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los impres...
Bueno es dar cuando nos piden; pero mejor es dar sin que nos pidan, como buenos entendedores.
Con los curas y los frailes, buenos días y buenas tardes.
La necesidad nunca hizo buenos negocios.
No son buenos los extremos aunque sea en la virtud.
Los hombres buenos y bellos se conquistan con gentilezas.
Es fácil ser buenos cuando no estamos enamorados.
Los buenos modales se consiguen a base de pequeños sacrificios.
Las pasiones son buenos instrumentos, pero malos consejeros. El hombre sin pasiones sería frío, pero en cambio el hombre dominado por las pasiones, es ciego.
Saber reconocer lo que hay de bueno en los demás nos hace buenos.
Lo importante en el ajedrez son los buenos movimientos.
Hasta los sentimientos buenos, si se exaltan en demasía, son capaces de conducirnos a errores deplorables.
Siempre he sentido que hay algo en Buenos Aires que me gusta. Me gusta tanto que no me gusta que le guste a otras personas. Es un amor así, celoso.
Si hacemos el bien por interés, seremos astutos, pero nunca buenos.
No es bueno que los hombres sepan hasta que punto somos buenos.