Frases de diablo. Encuentra docenas de frases de diablo con fotos para copiar y compartir.
La mujer actual tiene una obsesion por ser igual que el hombre, y no se por que, si el hombre es un pobre diablo desorientado.
La mujer es un manjar digno de los dioses, cuando no lo guisa el diablo.
Al que toma y no da, el diablo se lo llevará.
En arca de avariento, el diablo yace dentro.
El diablo mira con envidia a quien sufre mucho y lo expulsa al cielo.
Cuando dios se hizo hombre, ya el diablo se había hecho mujer.
Parece significativo que en griego el diablo se llame propiamente "calumniador": diabolos.
El diablo se viste algunas veces de serias razones para odiar.
Cuando el diablo está satisfecho, es una buena persona.
La mujer, solo el diablo sabe lo que es; yo no lo sé en absoluto.
Las botas del diablo no hacen ruido.
El que no agradece, al diablo se parece.
Un ángel para prestar y un diablo para cobrar.
Cuando el diablo habla, licencia tiene de dios.
Es muy puntual el diablo.
Detrás de la cruz está el diablo.
Más sabe el diablo por viejo que por diablo.
El diablo solo tienta a aquel con quien ya cuenta.
Dios no habría alcanzado nunca al gran público sin ayuda del diablo.
Tanto quiso el diablo a sus hijos, que les sacó los ojos.
El rosario en el cuello, y el diablo en el cuerpo.
Lo terrible en cuanto a Dios, es que no se sabe nunca si es un truco del diablo.
Dios es un pobre diablo, con un problema demasiado complicado para sus fuerzas. Lucha con la materia como un artista con su obra. Algunas veces, en algún momento logra ser Goya, pero generalmente es ...
Vive de manera que puedas mirar fijamente a los ojos de cualquiera y mandarlo al diablo.
Hágase el milagro, y hágalo el diablo.
El diablo, harto de carne, se metió a fraile.
Cuando el diablo no tiene qué hacer, con el rabo mata moscas.
Quien no reza al Señor, reza al diablo, ya que cuando no se proclama a Cristo, se proclama la mundanidad del diablo
Tengo de mi raza el ascetismo y del diablo la soberbia.
El mismo diablo citará las sagradas escrituras si viene bien a sus propósitos.
El café debe ser caliente como el infierno, negro como el diablo, puro como el ángel y dulce como el amor.
Todo aquel que aspira al poder ya ha vendido su alma al diablo.
El sarcasmo es el lenguaje del diablo.
El valor del dinero es que con él podemos mandar a cualquiera al diablo. Es el sexto sentido que te permite disfrutar de los otros cinco.
Odio al cinismo más que al diablo, a menos que ambos sean la misma cosa.
Con la palabra diablo se consiguió crear un enemigo poderosísimo y temible de tal manera que era razonable sufrir por tal enemigo.
Cuando el diablo se mezcla en los asuntos humanos para arruinar una existencia o trastornar un Imperio, es muy extraño que no se halle inmediatamente a su alcance algún miserable al que no hay más ...
-Que no lo oiga el diablo, señor ministro, El Diablo tiene tan buen oído que no necesita que se le digan las cosas en voz alta, Entonces que dios nos valga, No vale la pena, ése es sordo de nacimie...
Y como siempre pasa tarde o temprano a quienes negocian con el diablo, descubren demasiado tarde que lo que han perdido en el trato es su propia alma.
Cuando un marido y una mujer se comprenden, solo el diablo sabe quién comprende a quién.