Andre gide buenas intenciones. Encuentra docenas de andre gide buenas intenciones con fotos para copiar y compartir.
'Por lo tanto' es una palabra que el poeta no debe saber.
Ninguna teoría es buena si no lo permite, no descansa, pero el mayor trabajo. Ninguna teoría es bueno, sino solo con la condición de que uno lo utilizan para ir más allá.
Las cosas más bellas son las que pide la locura y la razón escribe.
Es más fácil llevar a los hombres al combate, provocando su pasión, que para frenar ellos y dirigirlos hacia las labores de los pacientes de la paz.
Viejas manos del suelo, al parecer, lo hacen caricias, pero ellos también tienen su belleza cuando se les une en la oración. Se hicieron las manos jóvenes de caricias y la envoltura del amor. Es un...
A través de la fidelidad al pasado, nuestra mente se niega a darse cuenta de que la alegría del futuro solo es posible si hoy deja paso a ella, para que cada onda debe a la belleza de su línea solo...
Arte comienza con la resistencia - en el punto en el que se supera la resistencia. No maestra humano ha sido creado sin un gran trabajo.
¿Hasta qué grado el mismo pasado puede dejar distintas marcas - y sobre todo admitir distintas interpretaciones.
Hay muy pocos monstruos que justifican el miedo que tenemos de ellos.
El arte es la colaboración entre Dios y el artista, y menos que el artista hace lo mejor.
Hemos construido catedrales inmovibles en la arena.
Nuestros actos están unidos a nosotros como al fósforo su luz. Nos consumen, verdad es, pero producen nuestro esplendor.
El único arte que se adapte a mí es el que, al pasar de los disturbios, tiende hacia la serenidad.
El pensamiento de la muerte me persigue con una obstinación singular. A cada gesto que hago, calculo: ¿cuántas veces ya? Me pregunto: ¿cuántas veces todavía? Y siento, lleno de desesperación, p...
... y tomando por tierra firme el flotante tapiz de flores, perdió pie bruscamente
Todas las cosas son ya dichas; pero como nadie escucha, hay que volver a empezar siempre
No se descubren nuevos continentes si no se tiene el valor de perder de vista las viejas orillas.
Se necesita mucho talento para hacer soportable el genio.
Nuestra alegría es igual que el agua movediza de los ríos, que solo debe su frescor a su constante fugacidad
Todo en mí se abre, se asombra; me late el corazón; una sobreabundancia de vida me sube a la garganta como un sollozo. Ya no sé nada; es una vehemencia sin recuerdos y sin arrugas.
Mi propia posición en el cielo con relación al Sol no debe hacerme encontrar menos bella la aurora
El color de la verdad es gris.
La sabiduría no viene de la razón sino del amor.
Comprendí que la sed de disfrutar que nace en cada momento de voluptuosidad, se anticipa al gozo, de la misma manera como existen respuestas listas para cualquier pregunta.
Lo importante se halla en la mirada, no en la cosa mirada
El poeta cree que cuando muera se irá volando con todo y cama, derechito al cielo
Que mi libro te enseñe a interesarte más en ti mismo que en él, luego, en todo el mundo más que en ti mismo.
Mi alegría tiene algo salvaje, fiero, en ruptura con toda decencia, toda conveniencia, toda ley.
Todo ya se ha dicho una vez; pero como nadie escucha, hay que decirlo de nuevo.
El hombre es más interesante que los hombres. Dios lo hizo, y no en su imagen. Cada uno es más precioso que todos.
Nada se opone a la felicidad como el recuerdo de la felicidad.
Todas las cosas adquieren importancia para nosotros en cuanto nos damos cuenta de que existen.
Con buenos pensamientos puede hacerse pésima literatura
Y cuando durante todo ese tiempo se piensa que los demás van al placer sin deseo, se piensa en ¡cuánto darían ellos por sentir hasta el más leve escalofrío de fiebre, y que uno de ese temblor mu...
La posesión completa solo se demuestra dando. Todo cuanto no podemos dar nos posee.
Querría flagelar con todas mis fuerzas a los que se ríen de la castidad como de una tontería, a los que se burlan de la virtud como de una debilidad y creen que un libertino tiene más carácter qu...
El porvenir pertenece a los innovadores
Ella no me amó a mí, sino al que yo deseaba ser, y siempre me reprochó que no hubiese cumplido mis deseos.
No estoy ni triste ni alegre; este aire de aquí te llena de una muy vaga exaltación y te hace conocer un estado que parece tan lejano de la alegría como de la pena; quizá esto sea la felicidad.
Lo bello es aquello que es inteligible sin reflexión.