La verdadera civilización es aquella en la que todo el mundo da a todos los demás todos los derechos que reclama para sí mismo.
Prefiero vivir y amar donde la muerte sea el rey que una vida eterna donde no hay amor.
El amor es el único arco de la nube oscura de la vida. Es la estrella matutina y vespertina. Brilla en la cuna del bebé, y derrama su resplandor sobre la tumba tranquila. Es la Madre del Arte, inspi...