Lo grande del flamenco es su contención. No explota pero allí hay una energía descomunal, sensualidad y erotismo que vibra todo el tiempo Pero también están la austeridad, el ascetismo.
Antonio Gades
Dónde vamos tan deprisa, me pregunta su sonrisa
Vivir es conocer y experimentar esta vida humana. Acertar o no es secundario.
La vida es para asumirla con valentía.
El que empieza dudando de pequeñeces termina dudando de la vida como tal.