Se dice que existen tres clases de testigos: Los que han visto bien, pero dudan de lo que han visto. Los que han visto mal, pero creen haber visto bien. Y los que no han visto nada y aseguran haber vi...
Jamás hay que discutir con un superior, pues se corre el riesgo de tener razón.
Se llama aplomo la capacidad de enfrentarse a la guillotina sin perder la cabeza
Sin ir más lejos: si a usted le transplantan mi cerebro por ejemplo, y a mí el suyo, usted sería el autor de este libro, y yo un hombre cuerdo.
Cuando las estadísticas nos dicen que la familia mexicana tiene un promedio de cuatro hijos y medio, nos explicamos por qué siempre hay uno chaparrito.
Las pulgas de aquel perro estaban tan bien organizadas, que cuando llegaba una nueva, la mandaban a la cola.