Colección de pepe
Pensar es decir no. Reflexionar es negar aquello que creemos.
Alain DelonEl teléfono de la oficina no suena en los quince primeros minutos de la jornada a menos que uno llegue tarde, y si se da el caso, suena continuamente hasta que uno se incorpora a su puesto.
Paul BourgetLa motivacÃon nos impulsa a comenzar y el hábito nos permite continuar.
Jim RyunLa gente se condena sola.
yany-patoTe Nombraré Veces Y Veces
Te nombraré veces y veces.
me acostaré con vos noche y dÃa.
Noches y dÃas con vos.
Me ensuciaré cogiendo con tu sombra.
Te mostraré mi rabioso corazón.
Te pisaré loco de furia.
Te mataré los pedacitos.
Te mataré una con Paco.
Otro lo mato con Rodolfo.
Con Haroldo te mato un pedacito más.
Te mataré con mi hijo en la mano.
Y con el hijo de mi hijo muertito.
Voy a venir con Diana y te mataré.
Voy a venir con José y te mataré.
Te voy a matar derrota.
Nunca me faltará un rostro amado
para matarte otra vez.
Vivo o muerto un rostro amado
hasta que mueras
dolida como estás ya lo sé.
Te voy a matar yo
te voy a matar.
Un mito no es un mito hasta que puede anunciar un perfume o una marca de zapatillas.
Manuel VicentUna mujer superficial es como una olla enorme, ocupa mucho espacio pero por dentro esta vacÃa...y nadie la va a llenar.
Nilson AndradeEl genio es el arte de la oportunidad.
Nicolas Boileau-DespréauxDespués de la propia sangre, lo mejor que el hombre puede dar de si mismo es una lágrima.
Lady Mary Worthley MontaguHay que tener aspiraciones elevadas, expectativas moderadas y necesidades pequeñas.
H. SteinIsla En La Tierra
Al norte el frÃo y su jazmÃn quebrado.
Al este un ruiseñor lleno de espinas.
Al sur la rosa en sus aéreas minas,
y al oeste un camino ensimismado.
Al norte un ángel yace amordazado.
Al este el llanto ordena sus neblinas.
Al sur mi tierno haz de palmas finas,
y al oeste mi puerta y mi cuidado.
Pudo un vuelo de nube o de suspiro
trazar esta finÃsima frontera
que defiende sin mengua mi retiro.
Un lejano castigo de ola estalla
y muerde tus olvidos de extranjera,
mi isla seca en mitad de la batalla.
El amor en Francia es una comedia; en Inglaterra, una tragedia; en Italia, una ópera y en Alemania, un melodrama.
Henri LacordaireSolo el que vive en la opulencia reniega de ella.
LucresioSi tienes miedo de algo, lucha contra eso. Si puede contigo, tenle más miedo.
ThrolaEl lenguaje polÃtico está diseñado para hacer que las mentiras suenen verdaderas y el asesinato respetable, y para dar una apariencia de consistencia al puro viento.
George OrwellSi sabiendo sabes que sabÃas, ignorando, ignoras que ignorabas.
Francisco RubioHojas Secas
¡En vano fue buscar otros amores!
¡En vano fue correr tras los placeres,
que es el placer un áspid entre flores,
y son copos de nieve las mujeres!
Entre mi alma y las sombras del olvido
existe el valladar de su memoria:
que nunca olvida el pájaro su nido
ni los esclavos del amor su historia.
Con otras ilusiones engañarme
quise, y entre perfumes adormirme.
¡Y vino el desengaño a despertarme,
y vino su memoria para herirme!
¡Ay, mi pobre alma, cuál te destrozaron
y con cuánta inclemencia te vendieron!
Tú quisiste amar ¡y te mataron!
Tú quisiste ser buena ¡y te perdieron!
¡Tanto amor, y después olvido tanto!
¡Tanta esperanza convertida en humo!
Con razón en el fuego de mi llanto
como nieve a la lumbre me consumo.
¡Cómo olvidarla, si es la vida mÃa!
¡Cómo olvidarla, si por ella muero!
¡Si es mi existencia lúgubre agonÃa,
y con todo mi espÃritu la quiero!
En holocausto dila mi existencia,
la di un amor purÃsimo y eterno,
y ella en cambio, manchando mi conciencia,
en pago del edén, diome el infierno.
¡Y mientras más me olvida, más la adoro!
¡Y mientras más me hiere, más la miro!
¡Y allá dentro del alma siempre lloro,
y allá dentro del alma siempre expiro!
El eterno llorar: tal es mi suerte;
nacà para sufrir y para amarla.
¡Solo el hacha cortante de la muerte
podrá de mis recuerdos arrancarla!
El colmo del infortunio es haber sido dichoso.
BoecioCuando un hombre sabe a donde va el mundo entero, se aparta para darle paso.
Bertrand Arthur William RussellSi pudiéramos vender nuestras experiencias en lo que nos cuestan, todos serÃamos millonarios.
Abigail Van Buren